Día Mundial de la Afasia

El Día Mundial de la Afasia se celebra cada año el 28 de junio para aumentar la conciencia
sobre esta condición que afecta a millones de personas en todo el mundo. La afasia es un
trastorno del lenguaje causado por daño en áreas específicas del cerebro, generalmente
como resultado de un accidente cerebrovascular, traumatismo craneal, tumor cerebral o
enfermedad neurológica.

¿Qué es la afasia?
La afasia afecta la capacidad de comunicarse, impactando la habilidad para hablar,
comprender, leer y escribir. Dependiendo de la gravedad y del área del cerebro afectada,
la afasia puede manifestarse de diferentes formas:
• Afasia de Broca (no fluente): Dificultad para formar palabras y oraciones,
aunque la comprensión puede estar relativamente intacta.
• Afasia de Wernicke (fluente): Habla fluida pero a menudo incoherente, con
dificultad para entender el lenguaje hablado y escrito.
• Afasia global: Severas dificultades en todas las formas de comunicación, siendo
la forma más grave de afasia.
• Afasia anómica: Problemas principalmente para encontrar las palabras correctas.

 

La afasia no afecta la inteligencia de una persona, pero sí puede impactar profundamente
su calidad de vida y sus interacciones sociales. Las personas con afasia pueden
experimentar frustración, aislamiento y depresión debido a las barreras comunicativas.
De ahí la importancia de no sólo intervenir en el habla y lenguaje, sino en cada una de las
áreas que cada paciente lo demande. La logopedia es fundamental en el tratamiento de la
afasia. Los logopedas trabajan con los pacientes para desarrollar y mejorar sus habilidades
comunicativas a través de diversas técnicas y ejercicios personalizados. La combinación
de logopedia y psicología es esencial para abordar tanto los aspectos comunicativos como
los emocionales de la afasia.
El tratamiento de la afasia se centra en la rehabilitación del lenguaje a través de la terapia
del habla y del lenguaje. Los terapeutas del habla trabajan con los pacientes para mejorar
sus habilidades comunicativas, utilizando técnicas que pueden incluir ejercicios de
repetición, uso de dispositivos de comunicación aumentativa y alternativa, y estrategias
para mejorar la comprensión y producción del lenguaje.