La logopedia en el colegio, ¿es suficiente?

La logopedia en el colegio, ¿es suficiente?

Los trastornos del habla y del lenguaje son una patología relativamente frecuente en la
infancia, y que preocupa cada vez más a padres y profesionales de la salud y la educación.
No solo por el aumento significativo de prevalencia, sino porque una alteración de la
comunicación en estas edades tempranas puede obstaculizar tanto la comprensión como la
expresión del menor; y por consiguiente, puede afectar a la formación de conceptos,
pensamiento, aprendizaje formal, interacción social, autoestima y el autoconcepto.
En muchas ocasiones, los logopedas escuchamos el comentario: “Mi hijo/a ya va al
logopeda de su cole” pero pocas veces nos preguntan si es suficiente y/o acertado.
Antes de dar la respuesta correcta a esta pregunta, es necesario corregir y matizar el
comentario en sí. En escuelas públicas no existe la figura del logopeda (sí es posible en
escuelas concertadas y privadas), sino que son los maestros de Audición y Lenguaje los
que trabajan con los niños con dificultades del aprendizaje. Y aunque se desconozca, estos
profesionales comparten muchos objetivos pero en ningún caso pueden realizar la misma
labor. El objetivo de este post es exponer las similitudes y diferencias entre ambas
profesiones, de manera que contemos con la información necesaria para responder a
nuestra pregunta inicial: ¿es suficiente la intervención “logopédica” en el ámbito educativo si
existe alguna dificultad en el aprendizaje o alteración en la comunicación?
En otros post anteriores del blog ya comentamos de forma más detallada las características
de la Logopedia, destacando siempre que dicha profesión de cuatro años de duración se
encuentra incluida en la Ley de Ordenación de las Profesiones Sanitarias de 44/2003. Por el
contrario, el maestro de audición y lenguaje o AL, es un profesional de la educación con un
único año de formación específica, es decir, es un profesional cuyo ámbito de trabajo queda
limitado a centros escolares y población infantil en edad escolar. Dicho de otra forma, el AL
interviene en alteraciones que puedan interferir únicamente en los aprendizajes escolares
del menor, a través de adaptaciones curriculares y apoyo educativo.
Por otro lado, el logopeda dirige su actividad a toda la población, tratando todas las áreas
del menor y no únicamente la escolar. La profesión le permite diagnosticar y diseñar
rehabilitaciones que sólo pueden ser puestas en práctica por maestros de audición y
lenguaje bajo su diseño.
Por lo tanto, aunque siempre se requiere la evaluación particular del paciente y del caso en
concreto, la respuesta a nuestra pregunta es NO; un maestro de audición y lenguaje apoya
y adapta de forma curricular los procesos de aprendizaje de nuestros hijos pero no
interviene clínicamente de forma directa sobre ellos, por lo que su labor educativa es
insuficiente en la mayoría de los casos.
Entonces, ¿qué se debería hacer? Para asegurar una efectividad del proceso de
intervención, se requiere la presencia de un logopeda en dicho proceso, con el fin de que
evalúe y diseñe la rehabilitación del niño en todas las áreas de la comunicación y no solo en
la del lenguaje. La cuestión esencial está en la necesidad de coordinarse de manera
constante y recíproca con el maestro de audición y lenguaje, estableciendo así lazos y
conexiones entre la escuela, la familia y la clínica.
Como ya hemos mencionado en post anteriores y sabéis, en Promente Psicólogos, contamos
con un equipo interdisciplinar de Logopedia y Psicología que defiende la necesidad de
coordinarse activamente con familias, maestros, y otros profesionales durante el tratamiento
rehabilitador de nuestros pacientes.